Lección 02 – Los Pactos de Dios con nosotros
Resulta maravilloso que Dios haya hecho contratos (o pactos) con nosotros. La mayoría son bilaterales, lo que significa que ambas partes (Dios y los seres humanos) tienen una parte que cumplir. Un ejemplo de un pacto bilateral es: “Si tú haces esto, entonces yo haré aquello”. O “Haré esto si tú haces aquello”. Una clase menos común de pacto es unilateral. “Yo haré esto ya sea que tú hagas algo o no”. Algunos de los pactos de Dios con la humanidad son unilaterales. Por ejemplo, Dios “envía su sol sobre malos y buenos y manda la lluvia sobre justos e injustos” (Mat. 5:45). Hagamos lo que hagamos o dejemos de hacer, podemos contar con Dios para tener la luz del Sol y la lluvia. Después del Diluvio, Dios prometió ante la humanidad y “toda bestia de la tierra” que nunca habría otro diluvio que cubriera toda la Tierra (ver Gén. 9:9–16), independientemente de nuestras acciones.
Esta semana estudiaremos algunos pactos bilaterales muy significativos entre Dios y sus hijos. Oremos para que, por la gracia de Dios, cumplamos con nuestra parte del trato.