Lección 05 – Calor extremo
Mientras su esposa estaba en el lecho de muerte, el famoso escritor cristiano C. S. Lewis escribió: “No es que corra mucho peligro (eso creo) de dejar de creer en Dios. El verdadero peligro es llegar a creer cosas sumamente terribles acerca de él. La conclusión que temo no es: ‘Pues, al fin y al cabo, Dios no existe’, sino: ‘Pues, así es Dios en realidad’ ” (A Grief Observed, pp. 6, 7).
Cuando las cosas se vuelven muy dolorosas, algunos rechazamos a Dios de cuajo. Otros, al igual que Lewis, nos vemos tentados a cambiar nuestra visión de Dios e imaginar todo tipo de cosas malas acerca de él. La pregunta es: ¿Cuán candente se puede poner esto? ¿Cuánto calor se arriesgaría Dios a permitir que experimente su pueblo a fin de lograr su propósito final de moldearnos a la “imagen de su Hijo”? (Rom. 8:29).
Un vistazo a la semana: ¿Por qué crees que Dios está dispuesto a correr el riesgo de que quienes desean conocerlo y amarlo lo malinterpreten? ¿Hasta qué punto crees que Dios está dispuesto a que lo malinterpreten para moldearte a la “imagen de su Hijo”?